Varios alumnos de 6º, 5º de primaria y alguna de 4º se han organizado para enseñar al alumnado de 1º y 2º a resolver el cubo de Rubik en los ratitos del recreo. ¡Es una gozada verlos jugar y aprender juntos!
Se trata de un pequeño proyecto de aprendizaje y servicio en el que los más mayores aprenden a enseñar, acompañar, reflexionar y mirar con paciencia y los más pequeños ven a sus compañeros como referentes y modelos.
Tanto unos como otros están encantados de dar su tiempo para los demás. Aterriza así un momento de encuentro en nuestro itinerario WE. Juntos nos ayudamos, juntos aprendemos, juntos nos dedicamos una mirada acogedora.
El cubo de Rubik no solo nos ha demostrado que no es un juego imposible, nos ha demostrado que también posibilita proyectos en común que nos acercan y nos unen ante las dificultades.
Agradecemos a Gonzalo, el profesor que lo ha organizado, su iniciativa para poner en marcha este proyecto.