Nuestros alumnos de 1 de ESO han hecho un taller de pintura rupestre desde el área de Sociales y Plástica.
Una vez trabajadas las características principales de este tipo de pintura, los alumnos pasaban por diferentes puestos donde tenían que pintar quemando palos, soplando con pajitas para hacer siluetas y pintando con barro, pigmentos y sangre.
La experiencia ha estado genial, ya que han trabajado muy concentrados y además hemos podido comprobar que se han aprendido todo el contenido sin necesidad de memorizar.
¡Esta manera de aprender sí que es otra historia!